Preparar gajos para multiplicar
Geranios, Hortensias, Malvones, etcétera.
Al preparar almácigos tener sumo cuidado
de protegerlos del sol. Si se emplea una bolsa de
arpillera, se puede regar por encima y retirarla recién
cuando las plantitas comiencen a asomar, pero sólo en
las horas en que el sol no está fuerte. Poco a poco, se
irá disminuyendo la protección.
Los Coleus no deben dejarse florecer
ya que su espiga, es insignificante y, terminando su
ciclo vital con la maduración de la semilla, las plantas
morirían demasiado pronto en la estación.
Despuntando las plantas de Salvia que
comienzan a crecer se logrará que ramifiquen
lateralmente ganando en robustez. Necesitan tierra
carpida y húmeda pero no un riego excesivo.
Habiendo concluido a florecer las
Calas, se dejarán sin regar y se procurará que reciban
sol, dejándolas así por un par de meses para que,
secándose el follaje, tengan un periodo de descanso.
Plantar los últimos bulbos de
Gladiolos, regándolos en abundancia cuando comiencen a
brotar, y tutorar luego las varas de sus flores.
Proteger con una media sombra de
listones o de hojas de palmera las plantas delicadas que
no aguantarían el fuerte sol de mediodía. |